Alejandro Magno Y Diógenes(Cuento para reflexionar)
ALEJANDRO MAGNO Y DIÓGENES Curiosidad. Según nos enseña la historia, la filosofía de Diógenes refleja justo lo contrario de lo que el síndrome de Diógenes representa. Los afectados de dicho síndrome tienden al aislamiento social y a rodearse de infinidad de objetos inservibles que acumulan en sus hogares. Como hemos visto, Diógenes prescindía de todo lo material. Al oír hablar sobre Diógenes, Alejandro Magno quiso conocerlo. Así que un día en que el filósofo estaba acostado tomando el sol, Alejandro se paró ante él. Diógenes se percató también de la presencia de aquel joven espléndido. Levantó la mano como comprobando que, efectivamente, el sol ya no se proyectaba sobre su cuerpo. Apartó la mano que se encontraba entre su rostro y el del extraño y se quedó mirándolo. El joven se dio cuenta de que era su turno de hablar y pronunció: - "Mi nombre es Alejandro El Grande”. Pronunció esto último poniendo cierto énfasis enaltecedor que parecía más bien apre