¿Qué hacer cuando hay demasiado por hacer?
¿Qué hacer cuando hay demasiado
por hacer?
“El que no
sabe a qué cosas atender y de cuáles hacer caso omiso, tiende a lo que no tiene
importancia y hace caso omiso de lo esencial.” Buda .
¿Te ha
pasado que te acuestas cansado, después de un largo día, y cuando intentas ver
los “avances” de la jornada, no te viene nada a la mente? A veces nos pasamos
el día haciendo cosas que no nos llevan a ningún lugar.
La mejor
forma de disfrutar y vivir cada día, con la que además seremos productivos, es
hacer en cada momento lo que verdaderamente corresponde hacer, siendo
conscientes del momento presente, y centrándonos en él. Es en el aquí y el
ahora donde somos creativos, y donde mejor aprovechamos el tiempo.
Con la
práctica de vivir el momento presente, con el simple hecho de prestar total
atención a lo que estás haciendo, y disminuyendo los ruidos de tus
pensamientos, podrás aumentar tu productividad.
¿Algo más
estaría afectando su productividad?
Identificar
y eliminar la causa del estrés traería como consecuencia ser más productiva en
el trabajo.
Y para ser
más productivos es esencial el orden, tanto en el exterior como en el interior.
En realidad, los nervios no colapsan, producen preocupación sobre algo que solo
sucedería en el futuro, que inmoviliza en el presente. En lugar de seguir
preocupándonos, debemos ocuparnos del asunto. Trabajar, eso es todo. Pero
hacerlo porque realmente os guste la tarea, y no para demostrar nuestra valía o
para recibir halagos y cumplidos.
La inteligencia... ¿qué es? ¿Una capacidad para
resolver problemas complejos? ¿Es un concepto que se refiere solo al
conocimiento, a la comprensión, al acto de entender?
Inteligente
es el que sabe que quiere vivir despierto, y sabe cómo lograrlo. Debo aprender
a elegir lo que me hará feliz, o al menos, debo aprender a evitar lo que me
hará infeliz, porque quien hace lo que siente, gana aunque pierda.
Cuando
cada cosa está en su lugar dentro de la
mente, habrá espacio en ella para dejar fluir la
creatividad.
1-
Simplificar.
En vez de
pasar mucho tiempo organizando la agenda, el escritorio, las reuniones, etc.,
el cambio debe ser hacia una vida más simple. Dejar el escritorio con lo
imprescindible, tener las reuniones que realmente aporten valor al trabajo. En
general, simplificar es tomar decisiones importantes acerca de lo que es
importante, en lugar de tratar de organizar todo lo que puedes hacer en tu día
de una manera lógica.
2- Reducir
los objetivos
Ponerse un
montón de metas hace perder mucho tiempo en la organización, administración y
medición de estos objetivos. En cambio, tener menos metas a lo largo del día, o
incluso en él. En cambio, tener menos metas a lo largo del día, o incluso en el
año, hace disfrutar más el camino, y centrarse más en las cosas importantes. Y
lo principal, hace que el foco esté en lo que realmente tienes deseos de hacer.
3- Descansar
en los tiempos de espera.
En las colas
de espera en el médico o en un medio de transporte, por lo general, también
queremos ser productivos. Es tiempo perdido que no se recuperará. Sin embargo,
este tiempo es oro si lo usamos para descansar, para relajar, tomar una siesta,
para observar a las personas que nos rodean y escucharlas sin juzgar, ver el
paisaje... Disfrutar de la vida que no va solo de productividad y de trabajo,
para que después podamos ser más productivos.
4- Trabajar
en algo que realmente te guste.
En vez de
trabajar una hora en algo que no te gusta y luego descansar 10 minutos como
recompensa, la idea es intentar que todo lo que hagas sea gratificante. Y así
después del descanso, sigas haciendo cosas gratificantes. Que tu vida esté
llena de actividades que disfrutas, y no empujando cada hora esperando a
que termine esa terrible jornada laboral. Disfrutar el camino, de eso se trata.
5- Ve
despacio
Intenta
hacer tu día a día un poco más lento, más despacio, disfrutando, como te decía
antes, de todo lo que haces, aunque sea lo mismo de ayer y de mañana. Piensa
que eso que estás haciendo es lo único que existe ahora y hazlo con amor.
Quizás necesites levantarte un poco antes o acostarte un poco después, pero te
aseguro que vale la pena. Esto traerá paz a tu vida, la tranquilidad que
necesitas, entre otras cosas, para ser más productivo.
Recuerda
algo: Nuestra productividad debería ser el resultado de nuestra felicidad y no
al revés. El tiempo es vida.
6- Elimina
las emociones negativas.
Esto se logra
muchas veces con solo dejar de juzgar las acciones propias y ajenas. Las
emociones negativas te paralizan y no te permiten actuar correctamente.
7. Evita el
perfeccionismo.
No trates
por todos los medios de hacer las cosas basándote en el ideal de perfección que
te han impuesto, haz sencillamente lo que tengas que hacer. De otra forma harás
menos. Simplemente, hazlo a tu forma, esto le pondrá tu sello particular y será
suficiente. Eres único e irrepetible ...recuérdalo siempre.
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