A Fuego Lento.....Sexo Lento ....Karezza

 A fuego lento.. Pasión Con Tiempo…
 Sexo lento ..... Karezza.

Para muchos expertos la intimidad es una expresión artística que tiene como protagonistas al cuerpo humano  y sus diferentes posibilidades para lograr el placer ;sin embargo, ¿qué es más satisfactorio, el sexo lento o rápido?

De acuerdo con el sexólogo Ian Kerner, la lentitud puede ser mejor para la vida sexual . Cuando las señales físicos de la excitación no son instantáneamente obvias, eso le da a la pareja más tiempo para jugar y conectarse en la cama.

Los comportamientos que suelen considerase como el  “calentamiento” se convierten en el evento principal del coito, y esto da a las parejas  la oportunidad de redescubrirse a ellos mismos y de forma sexual.


 ¿En qué consiste el sexo suave y lento?

La palabra “karezza” fue acuñada en el siglo XIX por la ginecóloga y obstetra norteamericana Alice Bunker Stockham, para identificar una manera suave y pausada de hacer el amor. Así, la pareja podría mantenerse por largo tiempo disfrutando de la relación sexual y experimentar estados sublimes de placer y éxtasis.

El sexo lento ha sido apreciado por muchos amantes a lo largo de la historia y en distintas culturas. En la tradición tántrica de la India, el ritual de sexualidad sagrada llamado Maithuna  es una forma de hacer el amor de manera lenta y sensual. En  las prácticas sexuales taoístas de China, la técnica de la penetración suave  es otra modalidad de sexo lento, que hace posible la penetración cuando la erección aún no es total.
Tiene el atractivo y la fuerza del deseo que se cultiva de manera deliberadamente lenta y suave, como saboreando, oliendo y sintiendo cada respiro, cada sensación, cada beso y cada movimiento al unísono. Es el placer exquisito de las cosas pequeñas que produce deleite sensual a través de todos los sentidos. Cuando haces el amor de esta forma, los dos cuerpos parecen fundirse en uno, sus cadencias están alineadas y el placer proviene de caricias que se expanden hacia zonas nunca antes exploradas.
Karezza no es un nuevo modo de mantener relaciones sexuales, sino más bien un nuevo nombre para una técnica que se remonta a muchos años atrás en la historia. La mayoría de la gente tiende a asociar las relaciones sexuales con la consecución del  orgasmo, como si hacer el amor sin orgasmo no tuviera sentido o fuera algo frustrante que nadie podría desear. Sin embargo, en eso consiste precisamente el karezza: en practicar sexo sin pretender alcanzar el orgasmo, de un modo más tranquilo y suave, y ejerciendo cierto control sobre la propia excitación y la de tu pareja, para evitar que vaya más allá de lo que podríamos llamar el punto sin retorno; es decir, el momento en que el cuerpo va directo hacia el clímax sin poder evitarlo.

Practicar karezza requiere un poco de práctica y aprender a mantener tu cuerpo en la fase que precede al orgasmo; la llamada fase de meseta. Cuando la excitación se vuelve excesiva, la pareja se permite dejar que se enfríe un poco, mientras continúa con un juego menos erótico, y así sucesivamente. Es una relación que no necesariamente se acaba con el orgasmo, sino sencillamente cuando la pareja desea que se acabe.


Beneficios del sexo lento.


  Hacer el amor de manera lenta ayuda a controlar la eyaculación y durar más tiempo durante la relación sexual. El pene se acostumbra poco a poco al entorno excitante que es la vagina, y puede estar más tiempo dentro, disfrutando de todas las exquisitas y placenteras sensaciones que le puede brindar.
        
       La mujer puede relajarse y concentrarse en sentir, sin preocuparse por el tiempo ni experimentar ansiedad de alcanzar el orgasmo antes que su pareja acabe o pierda la erección. Se puede centrar en las sensaciones eróticas que está experimentando, a la vez que siente una inmensa conexión con su compañero.
Una penetración lenta, sensitiva y sensual será siempre inmensamente 
apreciada por la mayoría de las mujeres. Muchas se sorprenderán, y sentirán un inmenso agradecimiento y admiración hacia su pareja, porque  tal vez jamás hayan experimentado algo similar.

Al expandir la energía sexual – y no descargarla inmediatamente en un orgasmo – el cuerpo se vitaliza, la pareja se compenetra y ambos pueden alcanzar estados de placer y éxtasis. 

Las parejas que utilizan esta técnica suelen volverse más sensibles al placer y suelen decir que el placer que sienten a nivel general es mayor, porque el karezza facilita que se sientan más unidos emocionalmente entre ellos. Al fin y al cabo, pueden hacer el amor durante mucho más tiempo sin cansarse y sin entrar en ese punto en el que una persona está sintiendo su propio placer con demasiada intensidad como para ser consciente de nada más, incluida su pareja.

El karezza ayuda a fortalecer el vínculo de amor  entre en la pareja. Las parejas que practican karezza tienden a hacer el amor con más frecuencia que el resto de las personas.
Los hombres con problemas de erección suelen superar sus problemas mediante el uso de esta técnica, por lo que puede resultar efectiva en estos casos.


Cuando se hace el amor de manera más afectiva que sexual, se liberan mayores cantidades de oxitocina,  que fortalece los vínculos de amor entre las personas y que también juega un papel importante en la erección y en la respuesta sexual. El orgasmo produce una rápida caída de los niveles de oxitocina.

Es una técnica indicada sobre todo para parejas ya establecidas, y quizás no tanto para parejas que acaban de iniciar una relación y sienten un deseo muy intenso el uno por el otro.

Practicar karezza ayuda a mantener la relación viva a pesar del paso del tiempo. Al comenzar una relación, se producen una serie de reacciones químicas que nos hacen estar un poco "trastornados". Por ejemplo, aumentan los niveles de cortisol (la hormona del estrés y de la activación física) y dopamina (relacionada con el placer) y caen los niveles de serotonina . Al cabo de un par de años aproximadamente, la fisiología vuelve a la normalidad y es el momento en que muchas parejas se separan, especialmente aquellas que no han establecido un vínculo que vaya más allá de la atracción física.

Practicar karezza ayuda a formar este vínculo, por lo que es un modo excelente de seguir sintiéndose atraído el uno por el otro.
Karezza incluye tanto caricias no eróticas, como caricias en lugares más erógenos e incluso la penetración o cualquier otra práctica sexual que os atraiga. La diferencia es que se practica de un modo más suave, evitando una excitación excesiva y el orgasmo.

Descubre a tu pareja. Esta práctica te permite explorar las zonas no erógenas, que también causan placer   y cuya sensibilidad varía según cada persona.



Disfruta cada momento. Te permite disfrutar  más de todas las etapas de una relación sexual, sin metas ni objetivos definidos que puedan perturbar su desarrollo.


Te permite tener mayor control. Con ello, hombres y mujeres, pueden intentar nuevas posicione o elementos en la intimidad, como los masajes eróticos.

En el sexo lento como en todo el campo íntimo de una pareja todo está permitido, siempre que exista respeto y confianza

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