La conexión entre el arte y el pensamiento puede parecer sorprendente. Muy a menudo nuestros encuentros con el arte pensamos que se reducen a ver y determinar si nos gusta o no lo que vemos. Sin embargo, mirar el arte de manera que tenga sentido requiere mucho más que eso.
La función más satisfactoria es que nos permite ejercitar nuestras mentes. Una obra de arte establece ciertos límites en función del asunto que trata, el estilo, los materiales y las técnicas. Luego nos permite observar y analizar estos hechos a través de un juego de exploración y reflexión. Al encontrar sus ambigüedades podemos proceder a un juego de especulación e interpretación. La obra de arte se presenta ante nosotros como un enigma, nos invita a descubrirla; nos desafía a entender lo que nos quiere decir, lo que expresa, de qué trata. Ante la obra nos preguntamos, ¿qué hay detrás de ese gesto?, ¿qué relación existirá entre los personajes?, ¿qué estarán sintiendo?, ¿qué habrá en ese lugar? Las respuestas pueden contener múltiples interpretaciones con ciertos grados y matices de complejidad, que nos llevarán a un trabajo de reflexión.Al observar una obra de arte se da inicio a un proceso reflexivo. Observar arte implica pensar, porque ante la obra nuestra mirada no es pasiva, sino que se vuelve reflexiva al necesitar toda nuestra atención para descubrir lo que tiene que mostrarnos. El observador intenta decodificar los símbolos de la pieza de arte en función de una serie de hipótesis que se plantea y las cuales están basadas en esquemas flexibles de lo que está en su mente .Al exponernos ante una obra de arte de forma mediada y sistemática se despierta nuestra percepción. Arnheim afirma que la percepción misma es una actividad cognitiva pues incluye todas las operaciones mentales que intervienen en la recepción, el almacenamiento y el tratamiento de información: la percepción sensorial, la memoria, el pensamiento y el aprendizaje. La percepción visual es pensamiento visual.
Para ver el arte es necesario ver más allá de lo que se advierte de inmediato. Como diría David Perkins, debemos de reflexionar sobre la obra de una manera inteligente, debemos de ser capaces de ver lo invisible.
Habría que mencionar que la interpretación de una obra de arte no excluye a las demás, de hecho, la acumulación de interpretaciones alternativas enriquece tanto la cultura, como nuestra visión. Cada uno captamos en una obra de arte a través de nuestros sentidos y apara cada persona será un experiencia distinta .A través de la mediación las obras de arte se convierten en estímulos visuales útiles para ejercitar y desarrollar operaciones mentales específicas, que son necesarias tanto en el área comunicativa como en la afectiva y la social. Las obras de arte ofrecen la oportunidad de trabajar operaciones mentales que son necesarias para la comprensión, el aprendizaje y la construcción del conocimiento. ¿Qué ves en la imagen que es lo que te hace decir eso? Se invita a que lleve a cabo un proceso de reflexión que le permita elaborar argumentos y defenderlos frente a los demás.
La forma de conexión entre el mundo y la mente son las imágenes, nos vamos generando imágenes de con colores, texturas, formas, etc. pero la mente va convirtiéndose con forme se madura en mecanismo selectivo .
En cuidado emocional puedo acompañarte a descubrirte a traves de los dibujos de una forma relajada, distendida , divertida y con la garantía de contención , sostén y apoyo .
Las imágenes visuales son vitales para el conocimiento Aristóteles alguna vez menciono “Sin una representación, de la actividad intelectual es imposible” .
Se ha llegado a la conclusión que entre más inmediata puede ser la respuesta dada, esta será menos acompañadas de recursos visuales. Pero hay diversos factores importantes, uno no puede forjarse de una conciencia un tiene que tener experiencias para tener un juicio, estoalbergara un banco de imágenes en sus mente, no necesariamente como se ha consensuado a nivel sociedad, toda persona tiene imágenes visuales desde un esquizofrénico hasta un ciego, el hecho de que sean distintas es algo distinto.
Ahora bien las imágenes mentales son solo generalidades de cada individuo, si formulamos un ejerció a un grupo en el cual se les indique “piensen en un sombrero” cada individuo según sus experiencias pensara en diferentes tipos de sombrero, si es que concordaran algunos quizá no pensarían en el mismo color, etc. pero eso no quita de que todas las imágenes sean genéricas, vagos recuerdos de sombreros, pero volvemos al mismo punto la mente humana no es igual para todos, si bien todos tenemos la capacidad de abstraer no todos lo haremos de la misma manera.
El pensamiento fluye generando nuevas ideas, se
establecen nuevas conexiones y relaciones entre ellas, reordenando el conjunto
en inusitadas configuraciones mentales. Se potencia la flexibilidad y se
abandona toda rigidez del pensamiento.
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